
El Gobierno retomó las negociaciones con el kirchnerismo para completar la Corte Suprema de Justicia, luego del parate electoral. Ambas partes avanzan sobre un esquema de “uno y uno”: un candidato propuesto por el oficialismo; otro por la oposición, sin vetos cruzados pero con nombres pactados.
Por el lado del Gobierno, el elegido sería el camarista Mariano Llorens, muy valorado en Casa Rosada. Sin embargo, dentro del propio oficialismo persiste el debate: algunos sectores sostienen que es estratégico que permanezca en la Cámara Federal, tribunal clave por su rol en las causas de corrupción y por el equilibrio interno que mantiene junto a Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi, Eduardo Farah y Martín Irurzun.
En el peronismo, el nombre que más suena es el de Anabel Fernández Sagasti, quien —a diferencia de María de los Ángeles Sacnun— no tendría objeciones del Gobierno.
Pero la negociación no se agota ahí. Con la renovación del Congreso en diciembre, la Casa Rosada evalúa abrir conversaciones con los senadores alineados a los gobernadores del peronismo tradicional, entre ellos Osvaldo Jaldo, Raúl Jalil (Catamarca) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero). Y es precisamente en ese espacio donde comenzó a cobrar fuerza un nombre que en Tucumán genera especial atención: Claudia Beatriz Sbdar, vocal del Superior Tribunal de Justicia provincial.
