Los padres de Valentino, Constantino y Benedicto se encontraron en una parrilla en el barrio de Palermo y fueron captados por las cámaras de televisión

Después de años de guerra mediática, a fines del año pasado llegó la paz entre Wanda Nara y Maxi López. La escandalosa separación de los padres de Valentino, Constantino y Benedicto fue signada por la aparición de Mauro Icardi como tercero en discordia, allá por el 2013, cuando el rosarino y el ex delantero de River Plate compartían vestuario en la Sampdoria. Y a partir de ahí, Maxi y Wanda se cruzaron dardos cada vez que pudieron, tanto a través de los medios tradicionales, en las redes sociales, pero también en la justicia, lo que reflejaba una mala sintonía entre ambos pese a ser padres de tres hijos

Sin embargo, tras estallar el Wandagate que marcó una fuerte crisis entre la hermana de Zaira e Icardi, hubo un acercamiento entre Nara y López. Así, la tensión comenzó a ceder y en la actualidad se muestran compartiendo momentos de lo más amenos. Por ejemplo, en la última Navidad, ambos compartieron una captura de la videollamada que mantuvieron pocos minutos después de las 12, con una copa levantada. También, y a comienzos de enero pasado fueron sorprendidos haciendo compras en un shopping de la zona norte. Y días después, el exfutbolista estuvo jugando un partido con sus hijos en la cancha del country de Santa Bárbara, donde la empresaria tiene la casa que en algún momento fue de ambos.

Tiempo después, se vio cómo compartió varias historias en las que se lo podía ver a López disfrutando del día junto a ella y sus hijos. En un video, en el que él le reprocha estarlo grabando, se lo escucha hablar de la “categoría” dónde debería jugar el mayor de los chicos. Y, en otro, se puede ver a Valentino entrenando duramente.

Luego se supo que el buen vínculo tenía que ver con que el hijo adolescente de ambos se estaba probando en las inferiores de River Plate. Según reveló Marcela Tauro en Intrusos (América) fue el propio López el que llamó a la institución para pedir una entrevista para su hijo que, según dicen, pinta como un muy buen jugador.

Y ahora, Maxi y Wanda volvieron a hacer pública su afinidad al mostrarse juntos en una misma mesa de un restaurant ubicado en el barrio porteño de Palermo. En la noche de este miércoles, las cámaras de distintos canales de televisión la vieron llegar a la conductora de Masterchef Argentina (Telefe) a una conocida parrilla. Asistió junto a su amigo inseparable, confidente y estilista Kennys Palacios, no hizo declaraciones a los micrófonos allí presentes y fue rauda a sumarse a la mesa en la que esperaban López y también los tres hijos que tienen en común.

De lentes negros, buzo púrpura y con una actitud muy relajada, Wanda llegó con una sonrisa plena y saludó a su exmarido con un beso en el cachete. Se la vio muy divertida con la situación, la cual parecía estar viviendo de manera sumamente natural, dejando en evidencia que estos encuentros familiares se están dando de manera cada vez más frecuente. Claro, de manera privada y muy lejos de las cámaras de televisión.