Tras el pedido de excarcelación solicitado por el abogado del futbolista, la Justicia decidió negárselo y ahora Alves regresó al complejo penitenciario. Hasta el momento, dio cuatro versiones sobre el hecho.
La Sala de la sección 3ª de la Audiencia Provincial de Barcelona rechazó la petición de puesta en libertad del futbolista brasileño Dani Alves y ordenó que permanezca en prisión preventiva mientras continúa la investigación sobre un abuso sexual ocurrido en una discoteca de Barcelona. El futbolista de 39 años, que negó haber cometido delito alguno, ingresó en prisión preventiva sin fianza el 20 de enero, después de que la policía local lo detuviera y lo interrogara.
En tanto los medios de comunicación se encontraban frente a la entrada de la prisión de Brians 2, donde Dani Alves fue trasladado después de que un juez ordenara su ingreso en prisión preventiva, sin fianza, por una presunta agresión sexual a una mujer en Barcelona.
Según explicaron fuentes judiciales, en la audiencia que se realizó a puertas cerradas el pasado jueves, la defensa del brasileño presentó el pedido de excarcelación luego de insistir en que Alves tiene el «arraigo suficiente en España» como para garantizarle a la Justicia que no se fugará del país. A su vez, y según publicó el sitio de noticias Rac 1, el abogado afirmó que «si bien sí hubo penetración vaginal en la noche del 30 de diciembre en la discoteca Sutton de Barcelona, esta habría sido consentida porque de lo contrario habría tenido lesiones en la zona genital».
Esta versión también se asienta en las cámaras de seguridad, que según la defensa, no acreditan el abuso sexual. Pese a la versión de la defensa, la fiscalía y la acusación consideran que el futbolista debe continuar con prisión preventiva debido a que existen importantes indicios contra el jugador que han sido comprobados en la víctima.
Además, se remarcó que «el hecho de que Alves sea brasileño y tenga un gran patrimonio le permitiría asegurar su fuga». Hasta el momento, Alves ha dado cuatro versiones de los hechos y en la última aseguró que la joven le había hecho voluntariamente una felación.
No obstante, las pruebas de ADN desmontaron todas las versiones porque hallaron restos suyos en el cuerpo de la víctima.