Con el regreso del voto negativo, los participantes se dirigieron al confesionario y determinaron que 8 de los 14 hermanitos queden en la placa del domingo. De igual manera, el líder semanal Martín decidió salvar a Juliana y subió a Virginia, por lo que esto cambió rotundamente al apuntado para ser eliminado.

El principal apuntado para convertirse en el noveno eliminado era Federico «Manzana» Farías, quien le declaró la guerra a Juliana y los fans de esta última no se lo perdonaron. Por eso, empezaron una fuerte campaña en su contra, aunque no consiguieron que deje la casa.

Como en esta gala hay ocho nominados, el conductor Santiago del Moro quedó frente a un complicado desafío, ya que en menos de dos horas tendrá que entrar a sacar gente muchas veces. Por eso, el programa se extendió hasta después de la medianoche.