Aunque el número marcaría una desaceleración de hasta 1,5 puntos porcentuales respecto de agosto, no trae alivio al bolsillo de los argentinos.
Consultoras privadas y expertos, empezaron a revelar los números que esperan para la inflación de septiembre remarcando que la cifra no bajaría del 11%.
Este número marcaría una desaceleración de hasta 1,5 puntos porcentuales respecto de agosto (12,4%), mes en el que se había marcado la más alta desde 1991. sin ser de todas maneras un dato alentador para la economía argentina.
Por ejemplo, según la consultora Libertad y Progreso (LyP), su relevamiento arrojó que el rubro “Alimentos y bebidas no alcohólicas” presentó una suba de 10,2%, con una incidencia de 2,4p.p. en el índice. A pesar de ser el que más aportó en la suba de la inflación, hubo ocho rubros donde las variaciones fueron superiores y se ubicaron en torno a los 2 dígitos.
Además, entre los más significativos se encuentran “Restaurantes y hoteles” con una variación de 17,4% e incidencia de 1,9 p.p., “Medicina” con un aumento de 12,2% e incidencia de 1,1p.p. y “Vivienda”, que aumentó 12,2% y tuvo una incidencia de 1% en la medición total.
Los especialistas destacaron que parte del resultado se debió al “efecto arrastre” que dejó el mes anterior impulsado por el “shock devaluatorio” post PASO.
«La inflación acumulada en los primeros nueve meses del año es de 100%; es la acumulada más alta desde la hiperinflación de 1990. Dentro de la última década, los registros acumulados más altos para los primeros nueve meses del año fueron 66,1% en 2022 y 37,7% en 2019», se indicó.