El rosarino reveló qué cosas tienen que ocurrir sí o sí en su cotidianeidad. Además, enumeró sus tres comidas favoritas y lo prohibido que cada tanto se permite.
En esta nueva etapa en la que se muestra más relajado que nunca, Lionel Messi abre las puertas de su intimidad sin miedo a nada. Y en ese sentido trascendió una entrevista que dio hace un tiempo en la que habló de sus manías, de sus comidad favoritas y del cambio que hizo en el modo en el que toma mate.
“Manías tengo muchas”, dijo el rosarino y se reconoció como uno más a la hora de llevar a cabo los rituales que le dan seguridad. “Antes de irme a dormir dejar toda la mesa preparada para el día siguiente”, contó y apuntó que nada puede alterar el orden que necesita, ni siquiera a la hora de los lugares que tanto él como los demás integrantes de su familia ocupan en la mesa.
“El desayuno… cada uno en su lugar, sentarme siempre en el mismo lugar, que cada uno tenga su lugar en la mesa, los nenes, Antonela, yo”, dijo, pero lo mejor vino después. Entre sus costumbres más privadas aparece el ítem zapatillas…
“Es llegar a la casa y sacarme las zapatillas enseguida, sea en mi casa o en la de alguien que tenga confianza”, marcó respecto de eso que lo define en su manera de comportarse, aunque se limitó a la hora de contar aquellas manías que llegan a incomodarlo: “No sé, tengo otras peores, pero prefiero guardarlas”.
Como deja ver y como marcan todos quienes lo conocen, Messi es el mejor del mundo en lo que hace, pero uno más a la hora de vivir. “Soy muy sencillo para las comidas: el asado, las milanesa, pastas, chocolate, dulce de leche, helado… Todo lo que sea dulce me gusta, me puede. Intento comer poco pero cada tanto me gusta”.
“¿El mate? Caliente y amargo. Antes tomaba dulce, pero después me acostumbré al amargo y hoy tomo mate amargo”.