
Luego de más de una semana de tensiones, el conflicto del transporte público en San Miguel de Tucumán llegó a su fin. Tras una reunión celebrada este viernes entre representantes de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) y funcionarios de la Municipalidad capitalina, se alcanzó un acuerdo que permitirá normalizar el servicio de colectivos a partir de la medianoche.
La medida pone fin a 48 horas sin transporte urbano, luego de que la seccional tucumana de la UTA (Unión Tranviarios Automotor) decidiera paralizar las 13 líneas urbanas en respuesta a las suspensiones de choferes dispuestas por las empresas.
El encuentro clave fue encabezado por la intendenta Rossana Chahla, junto al presidente del Concejo Deliberante, Fernando Juri, y los secretarios de Gobierno y de Movilidad Urbana, Camila Giuliano y Benjamín Nieva. En representación del sector empresarial participaron el vicepresidente de Aetat, Jorge Berreta, y propietarios de líneas urbanas. También estuvieron presentes el fiscal municipal Conrado Mosqueira y los secretarios de Economía y Hacienda e Ingresos Públicos, Alejandro Sami y Sebastián Ruiz Toscano.
Este fue el segundo encuentro de la jornada. En horas de la mañana, la secretaria Giuliano había participado de una mesa de diálogo en el Concejo Deliberante, junto a los ediles de la Comisión de Transporte, encabezada por el concejal José María Franco. Tras más de tres horas de deliberaciones, la reunión pasó a un cuarto intermedio que desembocó en la firma del acuerdo durante la tarde.
