El encuentro entre los finalistas tendrá como escenario el Maracaná de Río de Janeiro. El ganador se llevará un boleto para disputar el Mundial de Clubes, en diciembre, en Arabia Saudita.
Boca quiere la séptima y tras la euforia de su pase a la final de la Copa Libertadores, ya pone la cabeza en su rival: el Fluminense. Ambos conjuntos se medirán en un duelo de alto impacto el próximo 4 de noviembre en el mítico Maracaná de Río de Janeiro.
Para este partido, Conmebol ya arrancó con la venta de entradas y la primera etapa se inició el 12 de septiembre pasado. Los tickets se pueden adquirir a través de las plataformas oficiales (libertadores.eleventickets.com), con un máximo de compra por usuario es de cinco tickets (el usuario más cuatro personas) y serán nominadas.
Los hinchas también tendrán la oportunidad de comprar paquetes completos con: vuelos, acomodación y entradas ofrecidos por los paquetes oficiales de la Conmebol.
Los precios de las entradas rondan entre los USD 50 (o sea, unos 18.000 pesos según la cotización del Banco Central), categoría exclusiva para los dos equipos finalistas, y los USD 250 (unos 91.000 pesos), la primera categoría. En tanto, ya adelantaron que los dos clubes participantes dispondrán de al menos 20 mil lugares para vender entre sus socios.
En este encuentro, de haber empate en los 90 minutos, se recurrirá a un alargue de 30 minutos dividido en dos períodos de 15 minutos cada uno. Si al término de este alargue de 30 minutos suplementarios persistiera la paridad, se definirá al ganador por definición de tiros desde el punto de penal.
El ganador del partido se quedará con la clasificación directa al Mundial de Clubes, pero también se enfrentará al campeón de la Sudamericana en partidos de ida y vuelta a realizarse en fecha a determinar por la Conmebol (el campeón de la Libertadores definirá de local) por otro título en disputa: la Recopa Sudamericana.