Este fenómeno es poco frecuente y se produce cada dos años y medio. Todo lo que tenés que saber.

El último jueves de agosto traerá una Superluna en el signo de Piscis, también conocida como Luna Azul, un fenómeno poco frecuente, se produce cada dos años y medio.

Esto ocurre porque dos lunas llenas en el mismo mes indican una fuerte oleada de energía liberadora y hay maneras de aprovecharla.

Al respecto, la terapeuta de yoga Nour Pellé, especializada en astrología y numerología, le explicó a Vogue que esta Superluna Azul nos propiciará la renovación. ¿Qué significa esto? «Una relación, un trabajo, un trauma o incluso energías psíquicas que no son las nuestras podrían salir de nuestras vidas. Lo más probable es que sintamos un cambio, que nos encontremos con un nuevo espacio que llenar. Aunque esto pueda parecer inquietante al principio, dicho espacio trae consigo el potencial de algo nuevo».

Además, esta luna azul tendremos a Mercurio, Venus, Saturno, Neptuno, Urano y Plutón retrógrados. Aunque no es inusual que haya varios planetas retrógrados al mismo tiempo, que sean seis es realmente extraordinario.

«La energía retrógrada tiende a hacernos mirar al pasado. Es un momento de reflexión. Esto puede provocar contratiempos y hacernos sentir algo inseguros, darnos la sensación de estar en un círculo vicioso, sin saber lo que nos espera. Esta fuerte energía retrógrada del universo nos invita a escribir un diario, meditar y pasear por la naturaleza son formas fantásticas de calmar la mente y el cuerpo», explicó la especialista.

En tanto, indicó que luna llena en Piscis desprende vibraciones suaves y sensibles que nos permitirán transportarnos a nuestro interior, escuchar y oír nuestra propia voz. «Nuestros sueños pueden volverse más proféticos, y también podemos notar que el universo nos envía señales más claras. Bajo esta luna azul la magia está en el aire, así que mantente receptiva a lo que te ofrece, incluso si estás pasando por algún tipo de borrón y cuenta nueva o de liberación», detalló la astróloga.

Y finalizó: «Por último, debemos recordar que una luna llena en Piscis nos anima a analizar nuestras emociones y estimula nuestra sensibilidad. Esta luna llena azul nos ofrece la oportunidad de entrar en contacto con nuestro verdadero yo, de limpiar todo lo que ya no nos es útil y de crear espacio para algo más armónico. El camino puede parecer tumultuoso y plagado de baches, pero cuando las energías se calmen y recuperemos el aliento reconoceremos la transformación del alma que está en marcha con esta luna azul, tanto a nivel personal como colectivo. Estamos pasando por momentos importantes y frecuencias energéticas extraordinarias».