La escalada inflacionaria en alimentos y la consecuente pérdida del poder adquisitivo del salario, impactarían con fuerza en este nuevo índice.
Este miércoles, el INDEC publicará las cifras de pobreza e indigencia correspondientes al primer semestre del 2023, en lo que se espera sea un dato duro.
Es que según mediciones privadas, el número superaría el 40% y eso no abarcará totalmente el daño que la alta inflación y la devaluación de los últimos meses generaron a los argentinos.
Meses atrás, la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que difundió el organismo que conduce Marco Lavagna en marzo indicó que la pobreza cerró la segunda mitad del 2022 en 39,2%, por lo que alcanzó a 18.049.523 personas que viven en 4,4 millones de hogares.
En tanto, la indigencia se ubicó en el 8,1% y afectó a 3.729.620 personas.
En la cifra que se conocerá por la tarde, por otro lado, impactará con fuerza la devaluación del peso, que impulsó el Gobierno luego de conocer el resultado de las PASO.
Esta medida acordada con el FMI, tuvo un inevitable impacto en los precios de la economía, sumada a la alta inflación que acumula más de 120% interanual.