La reunión fue presidida por el obispo de Tucumán, Carlos Sánchez y allí se trataron cuestiones de interés social de vital importancia para los representantes eclesiásticos.

En el Arzobispado de Tucumán, el gobernador, Juan Manzur, junto al vicegobernador, Osvaldo Jaldo, fueron parte de un encuentro con autoridades de la Iglesia Católica Apostólica Romana que fue encabezado por el arzobispo de Tucumán, Carlos Sánchez, donde se desarrolló una mesa de diálogo en la que se trataron temas de interés comunitario y eclesiásticos.

Del conclave también participaron el obispo auxiliar, Roberto Ferrari; el arzobispo de la ciudad de Concepción, José Antonio Díaz; el padre José “Pepe” Abuín, entre otros integrantes de la Comisión Arquidiocesana de la Pastoral Social.

Manzur explicó: “fue una reunión realmente muy buena” dijo el Gobernador en la que se pudo hablar de la importancia de “generar las condiciones para la inversión privada a través del abastecimiento de energía y las rutas. Pudimos trasmitir lo hecho hasta aquí pero fundamentalmente lo que se realizará hacia adelante. Osvaldo Jaldo dejó muy claro cuál es el camino, el rumbo y el norte de la gestión”.

“Esta reunión fue de una magnitud muy importante. Hablamos de seguridad, producción, educación, inseguridad y combate a las drogas. Se abordó todo lo que tiene que ver con la lucha contra el narcotráfico y los avances importantes que arrojó la Ley de Narcomenudeo”, declaró Manzur.