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Este viernes, el auxiliar de fiscal Miguel Fernández, en representación de la Unidad Fiscal de Homicidios II, dirigida por Carlos Sale, oralizó un acuerdo de juicio abreviado en el marco de la causa por el crimen de Carlos Ezequiel Gordillo (25). El convenio fue rubricado por el fiscal, el imputado Dante Ezequiel Cabral (25) y su defensa, además de contar con la conformidad de la familia de la víctima.
Cabral llegó a esta instancia procesal como el único acusado. Se le endilgó ser el autor de la puñalada que acabó con la vida de Gordillo aquella mañana del domingo 25 de junio de este año, en el barrio Las Tipas de El Colmenar (Las Talitas).
Por otro lado, vale mencionar que dentro de este juicio abreviado se le acumuló a Cabral una probation que le fue revocada hace unos días. En ese hecho, cometido en octubre del 2022, intentó robar una motocicleta.
Con todo esto, en la ocasión las partes convinieron condenarlo a 10 años de prisión de cumplimiento efectivo por considerarlo coautor del delito de robo simple en grado de tentativa, en concurso real con el delito de homicidio simple en carácter de autor. Cabral confesó su culpabilidad y el juez resolvió la aprobación del convenio, al tiempo que ordenó el inmediato alojamiento en el servicio penitenciario.
El crimen
El 25 de junio del 2023, alrededor de las 7:40 de la mañana, Gordillo circulaba en su moto por calle San José Obrero y al llegar a la altura de la Manzana 4 del barrio Las Tipas (El Colmenar), Cabral, que estaba en una casa consumiendo bebidas alcohólicas, y con quien ya tenía problemas previos, le asestó una puñalada en la región supraclavicular.
Sin embargo, pese al ataque recibido, la víctima continuó en su moto unos metros hasta la vereda de una vivienda, donde se bajó para pedir ayuda, pero en la puerta cayó tendido al suelo y perdió la vida a causa de la herida. Cabral se dio a la fuga.
Intento de robo
El 4 de octubre del 2022, a las 1:35 de la madrugada, en avenida Juan B. Justo y Nicaragua, Cabral y otro sujeto abordaron a un hombre que circulaba en una moto Zanella 250cc. y se encontraba detenido por un desperfecto del rodado. En ese instante se le abalanzaron y le dijeron “dame la moto”. La víctima logró encenderla y abandonar el lugar. En tanto que el imputado fue posteriormente aprehendido.