La conductora intenta volver de a poco a sus redes para empezar a normalizar su día a día.
Las redes son la herramienta de muchos famosos que las usan para comunicar, vender, promocionarse o, incluso, para dejar sentada una opinión sobre algo grave que les pasa. Jesica Cirio suele publicar fotos, videos y reflexiones pero, tras explotar el caso de su ex Martín Insaurralde, en el que quedó involucrada hasta con denuncias por lavado de dinero, no se había mostrado demasiado en sus redes. Hasta hoy.
Sin palabras, eligió subir una foto que dice mucho más que un texto. La conductora de La peña de Morfi (Telefe) se sacó una selfie en medio de la madrugada del feriado en la que se la ve sonriendo.
La postal no es casual. Desde hace varios días, sobre todo luego de las dos entrevistas que le dio a Telefe, la modelo enfrentó, por un lado, las consecuencias judiciales de lo que se la acusa y, por el otro, los cuestionamientos morales que enfrentó en las redes.
Cirio ya había tomado una decisión en las últimas horas, en línea con esta foto que subió a sus historias de Instagram. La animadora había bloqueado las respuestas en sus publicaciones y nadie puede dejarle ni un solo comentario.
La mediática fue denunciada ante la Justicia por enriquecimiento ilícito y lavado dinero luego de que Sofía Clerici blanqueó su relación con Martín Insaurralde, con varios posteos en los que mostró lujosos regalos y un viaje en un yate en Marbella.
En cada reportaje que dio, Cirio expresó que sus gastos, durante los años que estuvo con el exintendente de Lomas de Zamora, siempre fueron independientes al de su marido y expresó que se nivel de vida era “normal”, de acuerdo a lo que ella ganaba.